Heavy Rain Zzzz

Uno de los juegos que mas me limo en mi vida fue sin dudas Wing Commander. Lo vi por primera vez en la casa de un amigo, usando la computadora de su hermano mayor que tenia placa VGA. No lo jugué seriamente hasta un par de años después cuando cambie mi maquina, y fue ahí que combinación de semi-simulador de vuelo y dramón espacial me marcó con el fuego mas profundo.



Como jugador no tenia nada para elegir en las interacciones con la tripulacion del Tiger’s Claw, ellos charlaban y tiraban tips, la historia tampoco era muy buena. Pero existía la posibilidad de que los wingman mueran en las misiones. Esta fragilidad los hacia mas humanos que cualquier personaje hasta el momento. Perderlos era duro, había un funeral bajonaso y hasta dejaban su lugar vacante en las escenas del bar de pilotos ¿Quien sabe que truco vital te iba a compartir Knight si lograbas salvarlo de ese misilazo Kilrathi? Me fascinó ser una parte tan activa de la historia.

Pasaron mas de 20 años y me encantaría poder decir que la narrativa en juegos progreso muchísimo desde entonces, pero la triste verdad es que salvo un par de casos contados con una mano, no se me ocurren exponentes de buenas historias interactivas a pesar de que este sea el medio ideal para intentarlo. El primer ítem de cualquier lista de características de un juego siempre dice “HISTORIA ÉPICA”, a pesar de que todos los juegos tengan la misma narrativa de hace mas de 20 años. Pareciera que la historia es sumamente importante pero no lo suficiente como para ofrecer algo distinto o de calidad.

Actualmente tenemos dos estilos de historias en juegos: Aquellas que solo existen para justificar el juego, que generalmente son forzadas y bastante chotas, y las que dominan el flujo del juego y que dejan a la jugabilidad en un plano lejano. No tengo un problema ideológico con los juegos centrados en historias, algunos de mis juegos favoritos son asi, simplemente me parece que en su enrome mayoría son poco honestos. Me da la sensacional de que quieren ser otra cosa.

Entiendo que para que Uncharted funcione tenemos que estar buscando algun tesoro historico en algún rincón inhóspito, así que no me rompo la cabeza contra la mesa ratona cada vez que Nathan Drake encuentra un mapa para un tesoro tibetano en Machu Pichu resolviendo un puzle de poleas. Lo que no entiendo es como puede ser que Heavy Rain me pida que toque cuadrado y cruz al mismo tiempo para atarme los cordones y que se supone que sea un juego. Mi desprecio por este tipo de practicas se extiende a otros medios. Lars Von Trier sera un genio, pero dejemosnos de joder, Dogville es una obra de teatro.

¿Cuanto más se puede mejorar el control de un cepillo de dientes?

Entiendo perfectamente que un creador quiera romper con los paréntesis que definen a un medio, pero hacerlo metiendo otro medio adentro es directamente de vago y/o chanta. No creo que todos los juegos deberían ser iguales, pero si creo que si tu juego parece una película, entonces deberías haber agarrado una cámara. Lo mismo va para todos esos juegos japoneses que son un anime con segmentos de dudosa interactividad. Me encantaría ver un anime con los increíbles diseños de personajes y bandas de sonido de Square Enix, pero no pienso comerme 60 horas de “juego” para poder disfrutarlos.

Lo mas triste de todo es que, al final del día, los jugadores buscamos validar nuestro medio predilecto de la peor manera, poniéndolo al nivel de otros medios. La cruda verdad es que nuestra pasión no sale airosa en esa computación. Si Heavy Rain o Metal Gear Solid 4 fuesen películas, serían films chotisimos. ¿Novelas visuales? ¿estamos todos locos? ¡Todas las novelas son visuales! Se me ocurren miles de cosas mas copadas para leer que Fate/Stay Night, inclusive si tu interés era puramente onanista.

O podemos ver grandes películas clásicas.

Mas triste aun es que la industria no haya podido identificar que en un videojuego importa mucho mas como se cuenta una historia que el contenido de la misma. Pasaron como 14 años, pero Half-Life sigue siendo uno de los mejores exponentes de narrativa interactiva a pesar de contar con el guión mas trillado y boludo del planeta. Imaginatelo como película: un científico abre un portal a otra dimension y se caga a tiros con una raza de extraterrestres. Es una estupidez, lo pones a Keanu Reeves y es la película hollywoodense mega-mogólica del verano.

Sin embargo, como juego funciona de maravilla, porque Half-Life prefiere poner al jugador en situaciones interesantes en vez de tirarle un montón de nombres propios que suenen imponentes y hablarle de cosas que no pasan frente a sus ojos. Los enemigos ni tienen nombre hasta el final del juego. Ni hablar de Half-Life 2, es una obra maestra en donde hay que parar a leer y escuchar para poder entender bien lo que esta pasando. Pero bueno, la leccion que aparentemente dejo Half-Life es que a los pibes les encantan las invasiones alienigenas.

Theodore Sturgeon una vez dijo que “el 90% de la ciencia ficción es una mierda, pero el 90% de todo es una mierda”. Las historias de videojuegos son un ejemplo casi perfecto de la Ley de Sturgeon y no es culpa de nadie mas que nuestra. No entiendo porque hay tanta gente buscando la validación masiva de este medio, porque tanta locura en que tal juego es una obra suprema para adultos. Si fuesemos adultos, podríamos reconocer si ningún problema que la gran mayoría de juegos son profunda e irremediablemente juveniles

¡Graaaoowww!

Juan Pablo Bouquet pasa su crisis de la mediana edad arrojándoles disquettes de 3"1/2 a los chicos que pisan su jardín. Seguí sus desvarios seniles todas las semanas en Tetabester.com.